El Banco de Turquía los eleva 750 puntos básicos hasta el 25%El Banco de Turquía

- El alza supera la de 650 puntos en el estreno de la gobernadora Erkan
- La lira ha pasado rápidamente a subir un 6% en el cruce con el dólar
- Los mercados veían insuficiente el giro al endurecimiento hasta el momento
El Banco Central de la República de Turquía (CBRT por sus siglas en inglés) ha decidido este jueves subir los tipos de interés en 750 puntos básicos hasta el 25% (el nivel más alto desde 2004) desde el 17,5% decretado en la reunión del mes pasado, en la que el alza fue de 250 puntos básicos. Esta considerable subida ha sorprendido a los mercados, que esperaban otro avance de 250 puntos básicos y ha provocado que la lira turca haya pasado rápidamente de perder un 0,1% en su cruce con el dólar estadounidense a ganar más de un 6% y situarse en las 25,47 unidades por ‘billete verde’.
Este agresivo movimiento de 750 puntos básicos supera en magnitud al aprobado el pasado 22 de junio, cuando la recién designada gobernadora del organismo, Hafize Gaye Erkan, antigua banquera de Goldman Sachs, se estrenó en el cargo con una subida de 650 puntos básicos que situó las tasas en el 15% desde el 8,5%.
Aunque la decisión de junio suponía un giro radical fruto de la intención del recién electo entonces presidente Recep Tayyip Erdogan de volver a la ortodoxia económica, motivo por el cual nombró a Erkan, poniendo fin a una racha de 27 meses sin subir el precio del dinero, el aumento decepcionó a unos mercados que esperaban mucho más.
En su anterior mandato, Erdogan contravino el dogma económico y, pese a la elevada inflación del país (la inflación llegó a superar el 80% interanual), su empeño fue bajar los tipos hasta un solo dígito para seguir estimulando el crecimiento económico. Es por ello que los inversores han tenido la sensación de que el banco central ha estado arrastrando los pies con sus subidas desde el tan esperado giro. Para el día del estreno de Erkan, algunos analistas esperaban hasta 3.000 puntos básicos de subida.
La subida de 750 puntos básicos de este jueves, no obstante, manda un poderoso mensaje en un momento en el que este giro hacia la ortodoxia de las autoridades económicas se estaba viendo en dificultades con un deterioro progresivo de la lira y con una inflación interanual que se situó en el 47,83% en julio, frente al 38,21% de junio, poniendo así fin a una secuencia de ocho bajadas consecutivas del índice de precios y alejándose sustancialmente de la meta de estabilidad a medio plazo del 5%.
Precisamente, en otro paso más hacia la ortodoxia, a comienzos de semana el CBRT comunicaba una serie de medidas encaminadas a la retirada gradual del costoso sistema de protección de los depósitos en liras frente a las fluctuaciones del tipo de cambio frente a las principales divisas, que fue introducido con carácter de emergencia a finales de 2021. Estas medidas, defiende el banco central, facilitarán la transmisión de la política monetaria.
“El Comité ha decidido continuar el proceso de endurecimiento monetario con el fin de establecer cuanto antes el rumbo hacia la desinflación, anclar las expectativas de inflación y controlar el deterioro del comportamiento de los precios”, ha explicado el Comité de Política Monetaria del banco en su comunicado de este jueves con la decisión sobre los tipos.
“Los indicadores recientes apuntan a un aumento continuado de la tendencia subyacente de la inflación. El fuerte curso de la demanda interna, las presiones sobre los costes derivadas de los salarios y los tipos de cambio, la rigidez de la inflación de los servicios y la normativa fiscal han sido los principales motores. Además de estos factores, también impulsados por la subida de los precios del petróleo, el deterioro superior al previsto de las expectativas de inflación y del comportamiento de los precios implica una inflación al final del año próxima al límite superior del intervalo de previsión facilitado en el Informe sobre la inflación”, añaden los miembros del Comité.
“El tipo de interés oficial se determinará de forma que cree las condiciones monetarias y financieras necesarias para garantizar una disminución de la tendencia subyacente de la inflación y alcanzar el objetivo de inflación del 5% a medio plazo. El endurecimiento monetario se reforzará tanto como sea necesario de forma oportuna y gradual hasta que se logre una mejora significativa de las perspectivas de inflación”, agregan.
Esta ha sido la primera decisión del Comité desde que se nombrara a tres nuevos vicegobernadores a finales del mes pasado. Entre ellos se encontraban un exasesor del Banco de la Reserva Federal de Nueva York y el execonomista jefe de uno de los mayores prestamistas privados de Turquía.
Techo por encima del 30%
“La subida de hoy contribuirá en gran medida a tranquilizar a los inversores en cuanto a que el retorno a la ortodoxia política va por buen camino. Las perspectivas de los tipos de interés son ahora aún más inciertas, pero creemos que es plausible que los tipos suban ahora muy por encima del 30% (nuestra previsión actual para finales de año) en los próximos meses”, valora Liam Peach, de Capital Economics, en una nota rápida.
El analista destaca la “gran sorpresa” que supone la decisión de este jueves en la medida en que los comunicados anteriores habían sugerido que los responsables de la política monetaria daban prioridad a un endurecimiento gradual para mantener la estabilidad financiera.
“En el comunicado se mantiene la orientación de endurecimiento gradual, por lo que no está claro el motivo exacto del cambio en el ritmo de subidas de tipos. Sospechamos que podría reflejar la preocupación por la pérdida de confianza de los inversores en el giro de la política monetaria y la reciente subida de los rendimientos del Tesoro estadounidense”, plantea Peach.
En lo que respecta a las perspectivas macroeconómicas de Turquía, sostiene el economista, esto podría cambiar las reglas del juego, allanando el camino para que el banco central suba los tipos a un nivel mucho más alto y aborde los desequilibrios macroeconómicos de Turquía. “Otra cosa es si el presidente Erdogan estaba de acuerdo con esta decisión, y no podemos descartar que el gobernador Erkan sea destituido como consecuencia de esta medida. Pero en este momento es difícil no sacar nada positivo de esta decisión”, matiza, sin embargo.
El camino, en cualquier caso, no ha terminado. “Para volver a situar la inflación en un solo dígito será necesario un periodo prolongado de tipos reales positivos, quizá con tipos de interés superiores al 40%. Aún no estamos convencidos de que esto vaya a ocurrir, pero unos tipos máximos superiores al 30% son ahora una probabilidad mucho mayor. Si esto se materializa, hay margen para que se alivie gran parte de la presión a la baja sobre la lira”, cierra el experto de Capital Economics.