Repsol reinicia su andanza con un margen de mejora del 23%
Está siendo un año complicado para las petroleras integradas europeas después de un 2022 que era prácticamente imposible de repetir gracias a sus elevados márgenes por un histórico precio del crudo. Las actuales previsiones de demanda global de combustible y la desaceleración económica global que baraja el mercado con la debilidad de la actividad en China han recortado el precio del petróleo hasta los 83,5 dólares por barril con los que cierra la semana. Y esto se ha notado hasta la fecha en la cotización de Repsol.
Sin embargo, la petrolera española se sitúa de nuevo sobre el precio de entrada a La Cartera de elEconomista.es al cerrar el viernes en los 13,87 euros por acción. La diferencia a favor de la estrategia es que ya deja beneficios en forma de dividendo al cobrar los 0,35 euros brutos por acción que se repartieron entre los accionistas el pasado julio, que supone sumar un beneficio de 254 euros al conjunto de la estrategia. Del mismo modo, La Cartera no baraja cerrar posiciones en Repsol por el momento ya que el consenso de mercado sigue confiando en la capacidad de mejora de la acción sobre el parqué en los próximos meses.